La imagen de hoy dice:
VOLUNTAD DE DIOS
MI VOLUNTAD
El título de la reflexión de hoy tiene como título: ¿Cómo ora usted? Esta pregunta no se refiere a la posición que acostumbra usar para orar, o cuanto tiempo ora, si ora todos los días o no. No, mi pregunta se refiere a su modo de pedirle a Dios lo que necesita.
Me ha sucedido, cruzarme en la vida con personas, cristianas; que oran para que Dios haga lo que le piden, sin detenerse a preguntarle al Señor ¿Es tu voluntad que esto ocurra? Esto que te pido ¿responde a lo que deseas que me ocurra a mí y a las personas por las que estoy orando? ¿Pensamos si con nuestras decisiones estamos atentando contra personas vulnerables?
Jesús nos dejó ejemplo, cuando todo estaba dispuesto para que vinieran a arrestarlo para llevarlo a morir en la cruz, por usted y por mí; dice la Palabra de Dios, la Biblia, que orando, le rogó al Padre que le evitara tanto sufrimiento, pero inmediatamente, vea en este pasaje de la Biblia lo que le dijo a Dios: "Y él se apartó de ellos a distancia como de un tiro de piedra; y puesto de rodillas oró, diciendo: Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya. Y se le apareció un ángel del cielo para fortalecerle. Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra.". Lucas 22:41-44.
Realmente Jesús es un gran ejemplo de sujeción a Dios; a pesar de que prefería que se hiciera lo que pedía, prefirió que se hiciera la voluntad del Padre. ¿Por qué? Porque el tenía fe, sabía que lo que Dios decide es lo mejor.
Si Jesús no se hubiera entregado voluntariamente, para morir por amor al hombre pecador (no por hombres buenos y perfectos) no tendríamos posibilidad de ser salvos. Gracias a su sacrificio, cuando le entregamos nuestro corazón a Jesús, nos arrepentimos de nuestros errores, pecados, maldades y egoísmos; Dios nos perdona y nos convierte en sus hijos.
¡Cuánto tenemos que agradecerle e imitar su actitud al orar!
Tenemos que aprender a llevarle nuestras necesidades en oración a Jesús, pero nunca tenemos que olvidarnos de decirle: Señor, que no se haga mi voluntad, sino la tuya, tú sabes que es lo que realmente me conviene. Confío en tí.
Siempre la voluntad de Dios, va a ser para nuestro bien, aunque no lo entendamos.
Que el Espíritu Santo de Dios, abra nuestro entendimiento hoy, nos de discernimiento para escuchar su voz y poder aprender a orar; aunque haga muchos años que conocemos a Jesús.
Dios le bendiga
Susana Goglián
"PADRE NUESTRO"
MARCOS BRUNET
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