La imagen de hoy dice:
Terminarás desilusionado, si piensas que la gente
Terminarás desilusionado, si piensas que la gente
hará lo mismo que tu harías por ellos.
No todos tienen el mismo corazón que tú.
Cada vez se hace más difícil vivir; en la actualidad la decepción ocupa un lugar muy común en el diario vivir.
Aunque usted ponga todo su esfuerzo por hacer las cosas bien, pensar en las necesidades de los demás, está dispuesto a ayudar y darle el lugar a las personas, que usted cree que lo necesitan y merecen; no es suficiente, la desilusión cada día va en aumento.
Aunque usted ponga todo su esfuerzo por hacer las cosas bien, pensar en las necesidades de los demás, está dispuesto a ayudar y darle el lugar a las personas, que usted cree que lo necesitan y merecen; no es suficiente, la desilusión cada día va en aumento.
¿Se siente identificado con este pensamiento? ¿Siente que nada de lo que haga es suficiente para vivir en armonía y contento?
Hoy mismo or ejemplo viví una situación que me asombró y desilusionó. A media cuadra de donde vivo, hay una pareja viviendo en la calle, ella está embarazada. Realmente Dios puso una carga muy grande en mi corazón por ellos, la impotencia que siento es muy fuerte. Llamé a la línea de ayuda que hay en la Argentina para ayudar a las personas en situación de calle, el 108, les dije donde estaban y me alegré dentro mío, porque los llevan a un parador, se pueden bañar, les dan la comida y así tienen un techo donde dormir, pero me enteré que no quisieron ir.
Seguía una gran carga en mi corazón, oro por ellos, los invité a acercarse a la iglesia para orar por su necesidad y el esposo no quiso.
Entonces le pedí al novio de una discípula que se acercara a hablar con ellos; sé que les llevó un desayuno caliente, en Argentina estamos en invierno y las temperaturas son muy bajas. Hoy me avisaron que le consiguió un hotel y le estaba consiguiendo trabajo.
Le agradecí mucho a Dios por esto. Pero esta noche pase cerca de ahí y los veo con las frazadas acomodándose en la puerta de un edificio otra vez, no lo podía creer; le dijeron a la persona que los ayudó que no querían estar en el hotel, que en ese lugar (en la calle) estaban cómodos. En este momento hace 8º. ¿Cómo no desilusionarnos, no le parece?
Hoy mismo or ejemplo viví una situación que me asombró y desilusionó. A media cuadra de donde vivo, hay una pareja viviendo en la calle, ella está embarazada. Realmente Dios puso una carga muy grande en mi corazón por ellos, la impotencia que siento es muy fuerte. Llamé a la línea de ayuda que hay en la Argentina para ayudar a las personas en situación de calle, el 108, les dije donde estaban y me alegré dentro mío, porque los llevan a un parador, se pueden bañar, les dan la comida y así tienen un techo donde dormir, pero me enteré que no quisieron ir.
Seguía una gran carga en mi corazón, oro por ellos, los invité a acercarse a la iglesia para orar por su necesidad y el esposo no quiso.
Entonces le pedí al novio de una discípula que se acercara a hablar con ellos; sé que les llevó un desayuno caliente, en Argentina estamos en invierno y las temperaturas son muy bajas. Hoy me avisaron que le consiguió un hotel y le estaba consiguiendo trabajo.
Le agradecí mucho a Dios por esto. Pero esta noche pase cerca de ahí y los veo con las frazadas acomodándose en la puerta de un edificio otra vez, no lo podía creer; le dijeron a la persona que los ayudó que no querían estar en el hotel, que en ese lugar (en la calle) estaban cómodos. En este momento hace 8º. ¿Cómo no desilusionarnos, no le parece?
Dios nos dice en su Palabra: "Levantaré los ojos a los montes, de dónde vendrá mi socorro, mi socorro viene de Dios que hizo los cielos y la tierra" Salmos 121:1.
Sólo en Jesús puede confiar completamente, porque Él nunca lo va a dejar, ni lo va a desamparar.
Dios no desilusiona, debemos saber que Dios cumple lo que promete.
Dios no desilusiona, debemos saber que Dios cumple lo que promete.
Le aconsejo que perdone a todos los que lo desilusionan, que renuncie al resentimiento y al rencor, para que su corazón esté en paz.
En momentos de tanta tristeza y debilidad, tenemos que buscar la presencia de Dios más que nunca; solamente el Señor puede fortalecernos, recordarnos las bendiciones que recibimos en el pasado, aquellas cosas que parecían imposibles y Dios permitió que ocurrieran sobrenaturalmente, debemos recordarlo, para volver a creer que pueden ocurrir también en el presente.
Jesús nos quita la venda que nos ciega y comenzamos a recobrar la visión para ver lo que Dios ve en nuestra vida.
Poner nuestra confianza en Jesús, es lo único que puede sostenernos en momentos de tristeza, soledad y desilusión.
Una vez leí la siguiente frase y jamás la olvidé: "Si no esperas siempre el bien, el mal no te afectará tanto". Es cierto, no podemos vivir esperando que los demás actúen como lo haríamos nosotros con ellos.
También le aconsejo que no se esmere por tratar de hacer todo perfecto, porque jamás logrará complacer a todos. El único Perfecto es Jesús.
Una vez leí la siguiente frase y jamás la olvidé: "Si no esperas siempre el bien, el mal no te afectará tanto". Es cierto, no podemos vivir esperando que los demás actúen como lo haríamos nosotros con ellos.
También le aconsejo que no se esmere por tratar de hacer todo perfecto, porque jamás logrará complacer a todos. El único Perfecto es Jesús.
No tema, espere en Jesús, Él todavía no terminó de trabajar en su vida.
No deje de orar y buscar su presencia cada día, de la misma manera que no puede dejar de respirar, porque de lo contrario moriría.
No se distraiga, las distracciones lo desconectan de Dios y después le costará mucho volver a ese estado de dependencia que tanto lo bendecía, cuando estaba rodeado con lazos de amor a Jesús.
Todo es más fácil cuando el Señor es el centro de nuestra vida.
No importa lo que le hayan hecho, lo único importante es que se una cada vez más al Señor y que camine, porque Él siempre irá adelante, nunca atrás, nunca en el pasado, ni en el día de ayer, ni en los recuerdos dolorosos.
Camine de la mano de Jesús y encontrará la libertad y el gozo en su corazón nuevamente. Los cielos se volverán a abrir sobre su vida.
Dios desea que usted sea feliz, decídase a serlo en los brazos de Jesús.
Dios le bendiga
Susana Goglián
"NO ES COMO YO"
Jesús Adrián Romero
Suscríbase, haga clic en el siguiente link:
