En primer lugar el agua es para el que tiene sed; nadie toma agua si no necesita ingerir líquido. Con los Ríos del Espíritu Santo ocurre lo mismo, para recibir esa plenitud, primero tiene que desearla y pedirla.
La Palabra de Dios, la Biblia, tienen hermosas promesas para nosotros; vamos a reflexionar sobre algunas de ellas.
La Palabra de Dios, la Biblia, tienen hermosas promesas para nosotros; vamos a reflexionar sobre algunas de ellas.
Dice en Jeremías 17:8: "Será como árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces junto a la corriente; no temerá cuando venga el calor, y sus hojas estarán verdes; en año de sequía no se angustiará ni cesará de dar fruto"
Ese es el deseo de Dios; pero para su tristeza, sigue diciendo en Jeremías 2:13:
"Porque dos males ha hecho mi pueblo: me han abandonado a mí, fuente de aguas vivas, y han cavado para sí cisternas, cisternas agrietadas que no retienen el agua."
¿Intentó alguna vez, en alguna urgencia recoger agua en un recipiente que no sabía que estaba perforado? ¿Qué pasó? ¿Retuvo el agua? No ¿verdad?
Pensaba hoy, si el deseo de Dios es que el hombre viva así ¡como árbol plantado junto al agua! Que no tema cuando venga el calor; que no se angustie en la sequía y que no deje de dar fruto. Eso es amor ¿No le parece? Expresa un amor incondicional por el hombre; desea que no le falte nada; quiere cuidarlo, evitarle cualquier tristeza.
¿Entonces porque no ocurre siempre eso?
Es muy fácil de explicar; porque el amor de Dios, es muy similar al que usted tiene por sus hijos. ¿Usted no desea que estén bien siempre, que no les falte nada; que nunca se enfermen, que estén siempre alegres y se sientan amados?
Dice la Palabra de Dios, en Mateo 7:11: "Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan?
Ahora piense... ¿Qué siente usted cuando hace hasta lo imposible para que sus hijos tengan todo eso que usted desea para ellos y por desobedecerlo, les pasa todo lo contrario? Dejemos por un momento el enojo de lado... ¿no siente una gran tristeza y decepción? ¿Por qué tienen que pasarle cosas malas, si usted está haciendo todo lo posible para evitarlo?
Otra reflexión importante, que lo hará volver en sí, cuando culpa a Dios de lo que le pasa. ¿Puede su hijo culparlo a usted por lo que le pasó, cuando usted está haciendo todo lo posible para que sea feliz y todo le salga bien en la vida, pero no ocurre porque lo desobedece y hace todo lo contrario de lo que usted le aconseja?
¿Puede ir a usted y decirle: Papá mirá lo que me pasó por tu culpa?
¿Cómo va viendo el tema? ¿Culpó usted alguna vez a Dios de lo que le pasa?
Sigamos leyendo la hermosa Palabra de Dios, que es ¡tan clara!
Oro para que tenga la revelación del Espíritu Santo, para comprender lo que estamos comparando y pueda lograr lo que Dios desea para usted; que sea feliz y que todo le vaya bien.
Oro para que tenga la revelación del Espíritu Santo, para comprender lo que estamos comparando y pueda lograr lo que Dios desea para usted; que sea feliz y que todo le vaya bien.
Dice con mucha misericordia y un gran amor de Padre en Jeremías 31:9:
"Con llanto vendrán, y entre súplicas los guiaré; los haré andar junto a arroyos de aguas, por camino derecho en el cual no tropezarán; porque soy un padre ...".
¡Cuánto amor de Dios para el hombre! ¡Qué diferente es a nosotros!
Observe, esta es la parte en que su hijo por no obedecerlo, vuelve a usted llorando; suplicándole... ¿Qué hacemos con el enojo lógico de un padre, al ver el sufrimiento lógico del hijo por su rebeldía?
Un paréntesis en esta reflexión: ¿Usted tiene conciencia de cuánto lo ama Dios?
Más allá del conocimiento quizás de años, por haberlo leído en la Biblia o haber escuchado tantas prédicas, diciendo: Dios es amor... Jesús le ama... etc.
¿Se detuvo a pensar que Dios lo ama como nadie más lo puede amar?
¿Quién más entregaría a su hijo único en manos de gente malvada, para salvar a gente que no dista mucho de esas personas... pecadores... indiferentes a Dios?
¡DIOS NOS AMA DEMASIADO!
Jesús podría haber dicho que no, entregar su vida, su cuerpo destrozado, por gente que quizás nunca lo ame...
ESO ES AMOR VERDADERO
Espíritu Santo despierta el espíritu, de cada persona que lee esta reflexión, revelales a Jesucristo, revela el inmenso amor que les tiene, que sus corazones rebocen de amor por Jesús, llénalos de tu Presencia maravillosa, colmalos de paz.
Te pido Espíritu Santo que los seduzcas de tal manera, que al finalizar esta reflexión sientan el deseo irresistible de arrodillarse y darle gracias a Jesús por esta salvación tan grande e inmerecida.
Abrázalos Jesús. Que sientan en todo su ser cuánto los amas. Amén.
"Con gozo sacarás agua de los manantiales de la salvación". Isaías 12:3
"Respondió Jesús y le dijo: Todo el que beba de esta agua volverá a tener sed, pero el que beba del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás, sino que el agua que yo le daré se convertirá en él en una fuente de agua que brota para vida eterna".
Juan 4:13-14
"Mi alma tiene sed de Dios, del Dios viviente;
¿cuándo vendré y me presentaré delante de Dios?" Salmos 42:2
"El último día de la fiesta era el más importante. Aquél día Jesús, puesto de pie, dijo con voz fuerte: –Si alguien tiene sed, venga a mí, y el que cree en mí, que beba. Como dice la Escritura, del interior de aquél correrán ríos de agua viva".
Juan 7:37 (Versión Dios habla hoy)
"Y me mostró un río de agua de vida, resplandeciente como cristal,
que salía del trono de Dios y del Cordero" Apocalipsis 22:1
¿Permitió que el Espíritu Santo despierte en usted, su sed desesperada por su Presencia?
No importa la situación que esté pasando. Jesús tiene todas las respuestas que usted necesita. Hable con Él y reciba su abrazo.
Corra ahora mismo a los pies de Jesús y entréguele su vida.
Dios le bendiga.
Feliz vida con Jesús.
Susana Goglián
Escuche esta canción.
"SUMÉRGEME"
Jesús Adrian Romero
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o su decisión de entregarle su
vida a Jesús. ¿Usted tiene idea de cuánto lo ama Dios?
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ES DE MUCHA BENDICIÓN PARA MÍ LEER SUS MENSAJES. BENDICIONES. Osana Goglián