Devocional Diario. Reflexiones para vos: "SI ES DE DIOS HAY PAZ Y ALEGRÍA"

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La imagen de hoy dice:

Nunca olvides

que si algo es de DIOS,

trae alegría y paz,

no tristeza.

Proverbios 10:22, en la versión TLA, de la Biblia, la Palabra de Dios, dice: "La bendición de Dios es riqueza que viene libre de preocupaciones".
A lo largo de la vida, el ser humano vive detrás de cosas que le agradan y quiere lograr obtener; pero los hijos de Dios; los que tenemos a Jesús en nuestro corazón; deberíamos discernir por medio del Espíritu Santo; cuando esas cosas son Voluntad de Dios, para nuestro bien y cuáles no permite que ocurran, porque sabe que nos causarían destrucción.
Lamentablemente, no solo las personas que viven lejos de Dios, insisten hasta obtenerlas, sin entender por qué les cuesta tanto; sino que los cristianos también se obstinan de tal manera, que se convierten en ciegos espirituales.
Dios nunca se equivoca, por eso debemos reconocer que, si algo es de Dios, trae alegría y paz; nunca tristeza.
Pero para eso tiene que conocer la naturaleza de Dios, que es Puro Amor, Generosidad, Misericordia y por ese motivo a sus hijos los protege, aún dentro de su necedad e insistencia.
El deseo de Dios es bendecir a sus hijos; llenar sus corazones de alegría y paz. Le encanta sorprenderlos con sus bendiciones, aún las inesperadas; pero todas ellas, son para bien en sus vidas. Por eso el resultado es que Él llena los vacíos de sus corazones, para que nunca más busquen en lugares equivocados, lo que creen que es “su felicidad”.
La bendición de Dios, nunca añade tristeza con ella; si no, que la alegría que produce vivir conforme al corazón de Dios, en Su Soberana Voluntad; llena de paz y armonía su vida.
El sueño de nuestra vida sería tener padres perfectos; que todo lo sepan, nos aconsejen bien; no nos permitan cometer errores; pero la perfección en la tierra no existe, ni existirá; pero nuestro Padre Celestial cumple todos esos deseos de nuestro corazón y muchos más que ni siquiera imaginábamos; es vivir a través del Espíritu Santo, una vida Sobrenatural; donde aún lo imposible, ocurre en nuestras vidas, de una manera asombrosa.
¡Cuánto Amor! ¡Cuánta Bondad la de Dios hacia nosotros! Tan desagradecidos e insistentes con las cosas que Dios por Amor y protección, nos dice: ¡NO!
Si tuviésemos, aunque sea un poquito de discernimiento espiritual, por lo menos; de nuestro corazón saldría una gran exclamación:
¡GRACIAS DIOS POR CUIDARME! ¡GRACIAS POR DECIRME QUE NO, PARA EVITARME UN FRACASO!
Nos dice la Biblia, la Palabra de Dios; tan sabiamente en Proverbios 3:5-6: "Confía de todo corazón en el Señor y no en tu propia inteligencia.
Ten presente al Señor en todo lo que hagas y él te llevará por el camino recto". (Versión: Dios Habla Hoy).
La Biblia, debería convertirse cada día, en nuestro mapa de ruta; no deberíamos salir sin leerla antes; para saber por qué camino transitar todo el día; porque tendríamos un éxito seguro para la Gloria de Dios.
Cuando no tenemos en cuenta lo que Dios nos dice; y seguimos caminando a nuestra manera “humana”; llena de errores; luego vienen las lamentaciones, la tristeza, la culpa; el remordimiento y cuando reaccionamos, solo nos queda decirle: Perdónanos Señor, por no escucharte, por no obedecerte; reconocemos que nos equivocamos; perdón por la autosuficiencia y la desobediencia.
Y lo más maravilloso de la vida; es que el Señor siempre está dispuesto a perdonar; porque para ese fin, Jesús murió en la cruz, cargando sobre sus espaldas, con todos nuestros pecados; con tanto sufrimiento. El justo, sufrió y murió por los injustos; para que al pedirle perdón; lavarnos con esa Sangre que derramó en la cruz y nos limpia de todos nuestros pecados y comenzamos la vida de nuevo de su mano; con el privilegio además de esa manera, de convertirnos en “hijos de Dios”; ya no solo ser criaturas creadas por Dios.
¡Cuánto para agradecerle al Señor! Dice en Juan 1:12: "Pero a quienes lo recibieron y creyeron en él, les concedió el privilegio de llegar a ser hijos de Dios".
Cuántas veces uno piensa: ¡si pudiera comenzar de nuevo y que no hubiera pasado nada de lo que viví! Eso no es posible lamentablemente; pero sí Dios le da la oportunidad de comenzar de nuevo, pero bien; de la mano de Jesús y obedeciendo a su Palabra, la Biblia, que nos otorga esa bendición, que no añade tristeza con ella para cada uno de nosotros.
Dele a Jesús el lugar que se merece en su corazón; aunque sea, hágalo por agradecimiento; por tanto Amor Inmerecido.
"Yo te he amado con amor eterno;
por eso te sigo tratando con bondad".
Jeremías 31:3
DHH