La imagen dice: QUE HACER EN CASO DE PECADO
Mantenga la calma
Usted está muerto. Romanos 3:23
No se alarme... Solo está muerto "espiritualmente"
Usted necesita nacer de nuevo Juan 3:3-6
Platique con Dios y confiesele sus pecados. 1ª Juan 1:9
Reconozca a Jesús como Salvador. Y Él que resucitó de la muerte. (Romanos 10:9)
Usted es salvo y es llamado hijo de Dios. Juan 1:12
¡FELICIDADES! Ahora tiene vida eterna con Dios.
¿Qué le parece la imagen? Bien gráfica y clara ¿verdad?
Nadie puede decir que nunca pecó en la vida, todos en algún momento le fallamos a Dios, aún debemos reconocer que ya nacemos en pecado, por Adán y Eva, pero que bueno saber que aunque merecíamos la muerte, Dios envió a Jesús a morir en nuestro lugar, para que por medio de Él, podamos ser libres del pecado, cuando reconocemos que Jesús murió en nuestro lugar y lo recibimos como Salvador de nuestras vidas.
¡Qué maravilloso es ser llamados hijos de Dios, por medio del sacrificio de Jesús! Sin hacer nada, solamente por creer, somos completamente perdonados y comenzamos una nueva vida.
Cambian de esa manera nuestras prioridades, lo que antes era tan importante, deja e tener valor para nosotros, pero a lo largo de la vida, tenemos muchas oportunidades de pecar, en el mundo que vivimos cada vez más somos tentados, las oportunidades de fallarle a Dios están a nuestra mano.
Pero hay algo importante para recordar, la tentación no es pecado; Jesús mismo cuando estuvo en la tierra fue tentado en "todo" dice la Palabra de Dios, pero decidió no pecar para agradar a Dios. Muchas veces el acusador, no quiere hacer creer que cuando somos tentados ya el Señor se enojó con nosotros, pero no es así.
Hebreos 4:15 dice: "Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino uno que ha sido tentado en todo como nosotros, pero sin pecado".
Por lo tanto Jesús nos comprende, porque sabe que somos débiles, pero también nos dejó su ejemplo siendo hombre en la tierra, para que sepamos que si Él pudo vencer la tentación, nosotros también podemos. Porque el mismo Espíritu Santo que fortaleció a Jesús, nos fortalecerá a nosotros.
Muchas veces escuchamos decir: "No pude resistir la tentación, era muy fuerte" ¿Pero sabe qué? Eso es mentira, sí... y no lo digo yo, lo dice la Palabra de Dios, lea lo que dice en 1 Corintios 10:13: "No les ha sobrevenido ninguna tentación que no sea común a los hombres. Fiel es Dios, que no permitirá que ustedes sean tentados más allá de lo que pueden soportar, sino que con la tentación proveerá también la vía de escape, a fin de que puedan resistirla".
O sea que cuando decimos no pude resistir la tentación y por eso pequé, estamos mintiendo, vamos en contra de la Palabra de Dios que es la única verdad, porque Jesús promete darnos la salida para poder resistir y el Señor no miente.
Pero claro, debemos orar y pedir la fortaleza de Dios para lograrlo, porque solos no podemos.
Dice la Biblia en 2 Corintios 12:9: "Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo".
Dice la Biblia en 2 Corintios 12:9: "Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo".
Jesús no lo deja solo, cuando se siente débil para decirle no a lo que a Dios no lo agrada, el poder de Dios viene sobre usted cuando ora y le dice: Solo no puedo ayudame Señor a resistir a la tentación con tu poder sobre mi.
La Salvación es un regalo, no podemos descuidarla. Aférrese si recibió a Jesús en su corazón, no malgaste ese regalo con distracciones que solo le darán tristezas, fracasos, culpa y desilusiones.
Jesús le ama. Decídase a vivir para Él. Entréguele su corazón a Jesús hoy mismo.
Dígale solamente con todo su corazón: Jesús, te recibo en mi corazón, te pido perdón por mis errores y pecados, lavame con tu sangre preciosa, la que derramaste en la cruz por mí, voy a seguirte todos los días de mi vida, me pongo en tus manos, gracias Jesús.
Hable cada día con Dios, de eso se trata de orar, con sus palabras, sinceramente, no oraciones aprendidas de memoria, lo que salga de su corazón, como cuando habla con sus seres queridos, Dios siempre tiene tiempo para escucharlo y siempre va a perdonarle.
Y si usted estaba en el camino del Señor y se alejo de Él por diferentes circunstancias, haga esa misma oración y dígale "Te necesito Jesús" quiero que vuelvas a ser mi mejor amigo, no encontré nada fuera de ti, te amo, perdóname, ayúdame a volver al camino de la salvación de tu mano.
Dios los bendiga
Susana Goglián
"PODEROSO" Hillsong
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