Debajo de este texto dice:
CONTINÚE LEYENDO
toque ahí para leer la reflexión completa
TRANSLATE You can translate the text in your language.
Above, before the blog title, on the left there are
three blue horizontal lines.
There you will find the translator
La imagen de hoy dice:
CONTINÚE LEYENDO
toque ahí para leer la reflexión completa
TRANSLATE You can translate the text in your language.
Above, before the blog title, on the left there are
three blue horizontal lines.
There you will find the translator
La imagen de hoy dice:
"El cielo y la tierra pasarán,
pero mis palabras no pasarán"
Mateo 24:35
pero mis palabras no pasarán"
Mateo 24:35
Hoy, viendo la imagen que le comparto, sentí el deseo de relacionar estos dos versículos de la Palabra de Dios, la Biblia; uno es el que menciona la imagen, dice en Mateo 24:35: "El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán"
Y el otro que venía a mi corazón, está en Juan 16:33; donde nos dice Jesús: "En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo”
¡Cómo sabe nuestro Dios lo que nos toca vivir en este mundo! Sus Palabras nos consuelan y nos dan esperanza, de que nada de lo que estamos viviendo es para siempre; hoy pienso en la actitud del ser humano… ¡Tanto afán, tanta ansiedad, tantos temores, tantas tristezas, tanto estrés! Son por creer inconcientemente que esto nunca va a terminar; que estamos condenados como con cadena perpetua, a soportar todas las injusticias de este mundo.
Por eso me parece tan importante que hoy reflexionemos juntos sobre esto.
En primer lugar, habiendo invitado a Jesús a nuestro corazón; que es lo primero y más importante para todo ser humano; habiéndole pedido perdón por nuestros pecados; con el firme deseo de no volver a cometerlos; Jesús nos lavó con su Sangre Preciosa, la que derramó en la cruz; con tanto sufrimiento; por usted y por mí… podemos estar seguros de que no estamos solos y siento en mi corazón; por algo que me mostró ayer mi Hermoso Jesús, que realmente me sorprendió; que nada escapa a su conocimiento y que le revela todo a sus hijos, los que Dios adoptó como hijos por recibirlo a Jesús en nuestro corazón.
¡Día a día me sorprende Jesús! Su Espíritu Santo me demuestra siempre sorpresivamente, que no quiere que esté triste; y hace o me revela algo que convierte mi cara larga en una sonrisa. ¡Cuánto Amor Inmerecido!
Sucede que Dios conoce a los que confían solo en Él y lo conocen, los que han aprendido a descubrir su naturaleza de: Bondad, Amor, Fidelidad Eterna y está pendiente de lo que les pasa. ¡Qué Padre Amoroso! Ningún padre terrenal, tiene la posibilidad de estar presente las veinticuatro horas del día con sus hijos; ni para siempre; pero Dios sí; para eso envió al Espíritu Santo para estar con nosotros SIEMPRE; luego que Jesús ascendió al cielo resucitado; no nos dejó solos.
Nuestra tarea, que es para nuestro bien, es estar atentos a SU PRESENCIA, porque Él está todo el día; no solo cuando nos dignamos a separar tiempo para orar o leer su Palabra, o para congregarnos. ¡NO! El Espíritu de Dios está todo el día en nosotros y con nosotros.
¡Qué privilegio! ¿No le parece? Creo que Dios no merece que nos enfoquemos en lo dura que es la vida, sino en Él, que venció al mundo.
Un día; se borrarán todos los malos recuerdos de nuestra mente; porque ya estaremos con Él en el cielo; donde Jesús fue a prepararnos un lugar; como dice en Juan 14:2: “En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros". ¡¡ES HERMOSA ESTA PALABRA!!
¿Se imagina? Llegar a nuestro lugar soñado durante tanto tiempo… aunque sé muy bien que muchos no tienen apuro para llegar ahí… prefieren el afán y la ansiedad del mundo; porque se sienten poderosos por tomar sus propias decisiones y luego así terminan…
Ese lugar que Jesús nos fue a preparar, es el cielo; donde encontraremos todo lo que tanto deseamos encontrar en la tierra, lo cuál nos resulta imposible, porque no todos desean lo mismo; vivir en paz, con generosidad, con integridad, donde nadie le hace mal al otro; con amor, compasión… parece una película de ciencia ficción ¿verdad? Pero tenga esperanza, así será el lugar que Jesús fue a preparar para nosotros; para que un día lleguemos y disfrutemos de su Presencia frente a frente; lo miremos cara a cara; veamos sus ojos, su sonrisa y percibamos SU AMOR en vivo y en directo.
Mientras tanto recuerde este versículo: "El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán" Mateo 24:35.
¿A qué se refiere Jesús cuando dice: “mis palabras”? A la Biblia, la Palabra de Dios, cada promesa, cada enseñanza, cada corrección; cada consejo; las muestras de su ejemplo cuando estuvo en la tierra; son las que no pasarán.
Lea la Biblia, guarde en su corazón sus Palabras. Hace muchos años, mi pastor enseñaba, que cuando lee la Biblia, cada conocimiento que adquiere, es como que se guardara en un arcón; y en el momento necesario, aparecerán en su mente, por medio del Espíritu Santo. Y es así, a mi me sucede eso y es hermoso.
Dependerá de su relación con Dios, durante todo el día; porque amará su Palabra, como lo más preciado que existe; justamente, porque esas Palabras no pasarán; permanecerán para siempre; porque como dijo Jesús: Él ha vencido al mundo.
No tema si Jesús está en su corazón y el Espíritu Santo está con usted y en usted; lo guiará y lo fortalecerá, para soportar cada día, un poquito más; hasta que Jesús vuelva a buscarnos, para estar con Él para siempre en “ese maravilloso lugar eterno”.
Y el otro que venía a mi corazón, está en Juan 16:33; donde nos dice Jesús: "En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo”
¡Cómo sabe nuestro Dios lo que nos toca vivir en este mundo! Sus Palabras nos consuelan y nos dan esperanza, de que nada de lo que estamos viviendo es para siempre; hoy pienso en la actitud del ser humano… ¡Tanto afán, tanta ansiedad, tantos temores, tantas tristezas, tanto estrés! Son por creer inconcientemente que esto nunca va a terminar; que estamos condenados como con cadena perpetua, a soportar todas las injusticias de este mundo.
Por eso me parece tan importante que hoy reflexionemos juntos sobre esto.
En primer lugar, habiendo invitado a Jesús a nuestro corazón; que es lo primero y más importante para todo ser humano; habiéndole pedido perdón por nuestros pecados; con el firme deseo de no volver a cometerlos; Jesús nos lavó con su Sangre Preciosa, la que derramó en la cruz; con tanto sufrimiento; por usted y por mí… podemos estar seguros de que no estamos solos y siento en mi corazón; por algo que me mostró ayer mi Hermoso Jesús, que realmente me sorprendió; que nada escapa a su conocimiento y que le revela todo a sus hijos, los que Dios adoptó como hijos por recibirlo a Jesús en nuestro corazón.
¡Día a día me sorprende Jesús! Su Espíritu Santo me demuestra siempre sorpresivamente, que no quiere que esté triste; y hace o me revela algo que convierte mi cara larga en una sonrisa. ¡Cuánto Amor Inmerecido!
Sucede que Dios conoce a los que confían solo en Él y lo conocen, los que han aprendido a descubrir su naturaleza de: Bondad, Amor, Fidelidad Eterna y está pendiente de lo que les pasa. ¡Qué Padre Amoroso! Ningún padre terrenal, tiene la posibilidad de estar presente las veinticuatro horas del día con sus hijos; ni para siempre; pero Dios sí; para eso envió al Espíritu Santo para estar con nosotros SIEMPRE; luego que Jesús ascendió al cielo resucitado; no nos dejó solos.
Nuestra tarea, que es para nuestro bien, es estar atentos a SU PRESENCIA, porque Él está todo el día; no solo cuando nos dignamos a separar tiempo para orar o leer su Palabra, o para congregarnos. ¡NO! El Espíritu de Dios está todo el día en nosotros y con nosotros.
¡Qué privilegio! ¿No le parece? Creo que Dios no merece que nos enfoquemos en lo dura que es la vida, sino en Él, que venció al mundo.
Un día; se borrarán todos los malos recuerdos de nuestra mente; porque ya estaremos con Él en el cielo; donde Jesús fue a prepararnos un lugar; como dice en Juan 14:2: “En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros". ¡¡ES HERMOSA ESTA PALABRA!!
¿Se imagina? Llegar a nuestro lugar soñado durante tanto tiempo… aunque sé muy bien que muchos no tienen apuro para llegar ahí… prefieren el afán y la ansiedad del mundo; porque se sienten poderosos por tomar sus propias decisiones y luego así terminan…
Ese lugar que Jesús nos fue a preparar, es el cielo; donde encontraremos todo lo que tanto deseamos encontrar en la tierra, lo cuál nos resulta imposible, porque no todos desean lo mismo; vivir en paz, con generosidad, con integridad, donde nadie le hace mal al otro; con amor, compasión… parece una película de ciencia ficción ¿verdad? Pero tenga esperanza, así será el lugar que Jesús fue a preparar para nosotros; para que un día lleguemos y disfrutemos de su Presencia frente a frente; lo miremos cara a cara; veamos sus ojos, su sonrisa y percibamos SU AMOR en vivo y en directo.
Mientras tanto recuerde este versículo: "El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán" Mateo 24:35.
¿A qué se refiere Jesús cuando dice: “mis palabras”? A la Biblia, la Palabra de Dios, cada promesa, cada enseñanza, cada corrección; cada consejo; las muestras de su ejemplo cuando estuvo en la tierra; son las que no pasarán.
Lea la Biblia, guarde en su corazón sus Palabras. Hace muchos años, mi pastor enseñaba, que cuando lee la Biblia, cada conocimiento que adquiere, es como que se guardara en un arcón; y en el momento necesario, aparecerán en su mente, por medio del Espíritu Santo. Y es así, a mi me sucede eso y es hermoso.
Dependerá de su relación con Dios, durante todo el día; porque amará su Palabra, como lo más preciado que existe; justamente, porque esas Palabras no pasarán; permanecerán para siempre; porque como dijo Jesús: Él ha vencido al mundo.
No tema si Jesús está en su corazón y el Espíritu Santo está con usted y en usted; lo guiará y lo fortalecerá, para soportar cada día, un poquito más; hasta que Jesús vuelva a buscarnos, para estar con Él para siempre en “ese maravilloso lugar eterno”.
De tal manera amó Dios al mundo
"Porque de tal manera amó Dios al mundo,
que ha dado a su Hijo unigénito,
para que todo aquel que en él cree,
no se pierda, mas tenga vida eterna".
Juan 3:16
"Porque de tal manera amó Dios al mundo,
que ha dado a su Hijo unigénito,
para que todo aquel que en él cree,
no se pierda, mas tenga vida eterna".
Juan 3:16
"Porque aun un poquito,
Y el que ha de venir vendrá,
y no tardará".
Hebreos 10:37
Y el que ha de venir vendrá,
y no tardará".
Hebreos 10:37
"DÍ LA PALABRA"
Mariana Sa
https://youtu.be/FWP4_g-S04c
Mariana Sa
https://youtu.be/FWP4_g-S04c
Lea y comparta el Devocional
en You Version
(Descargue la App YouVersion gratis)
Catedral de la Fe
LE OFRECE LA POSIBILIDAD
DE SEGUIR CONGREGÁNDOSE ONLINE
Desde todo el mundo
Pastores Osvaldo y Alejandra Carnival
Suscríbase al canal de
CATEDRAL DE LA FE
En Youtube Reciba notificaciones de los nuevos eventos
REUNIONES DEL FIN DE SEMANA
Sábados a las 6 PM y 8 PM
Y los domingos a las 10 AM y 5 PM
Y los domingos a las 10 AM y 5 PM
(hora Argentina)
En Youtube
Desde todo el mundo en:
Comuníquese desde todo el mundo
con la Iglesia Catedral de la fe:
Whatsapp: +54 9 1150961194
Únase a nosotros en www.catedraldelafe.org
Huellas Eternas Producciones
Los libros digitales, que ya fueron publicados en papel
de REFLEXIONES PARA VOS.
Puede solicitarlos por mail a en formato PDF a:
Dele ME GUSTA a la página de Facebook
Sígame EN FACEBOOK
Lea los devocionales todos los días en su celular
Ingrese a: www.reflexionesparavos.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
ENVÍE SU COMENTARIO ME LLEGA PRIVADO
ES DE MUCHA BENDICIÓN PARA MÍ LEER SUS MENSAJES. BENDICIONES. Osana Goglián