Devocional Diario. Reflexiones para vos: "PAZ EN MEDIO DE LA TURBULENCIA"

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Aunque haya turbulencias NO TEMAS

CRISTO ES EL PILOTO

En la Biblia en Mateo 8:24-26, podemos leer lo siguiente en la versión Dios habla hoy:

"En esto se desató sobre el lago una tormenta tan fuerte que las olas cubrían la barca. Pero Jesús se había dormido. Entonces sus discípulos fueron a despertarlo, diciéndole:

—¡Señor, sálvanos! ¡Nos estamos hundiendo! Él les contestó:

—¿Por qué tanto miedo? ¡Qué poca fe tienen ustedes!

Dicho esto, se levantó y dio una orden al viento y al mar, y todo quedó completamente tranquilo".

Jesús en medio de la tempestad se fue a dormir. ¿Por qué? Porque confiaba en su Padre, sabía muy bien que no los iba a abandonar.

Jesús conocía el Poder Sobrenatural del Espíritu de Dios. ¿De qué podía temer? Nosotros leímos desde hace veinte, treinta años, o más, donde la Biblia dice: "Para Dios no hay nada IMPOSIBLE"; (Lucas 1:37) la diferencia de nosotros con Jesús, es que Él sí lo creyó y lo practicó. No olvidó en ningún momento esa verdad; ni tampoco la promesa que dice: "El que pide recibe..." (Lucas 11:10)

La Palabra de Dios, no es para un momento y luego olvidarla; promesas de esa índole, no las debemos olvidar; porque son herramientas en momento de peligro; para desbaratar los planes del enemigo.

Dios quiere darle paz, aún en medio de la turbulencia; lo Ama mucho más de lo que usted puede imaginar; por eso necesita tener fe en sus Promesas que son para siempre.

Sentí escribir hoy sobre este tema; porque me pasó algo hoy mismo, que me asombró a mí misma y se lo compartí a mi líder. Ella hizo una observación que después les voy a compartir.

En cuando me levanté hoy, salí al pasillo y un vecino me dijo al oído que estaba el Gobierno de la Ciudad y que había posibilidad de que clausuraran el lugar; me sorprendí y le dije inmediatamente: le voy a pedir a Dios.

Volví a mi habitación y me iba a poner a orar y el Espíritu Santo me dijo que eso era un espíritu de venganza del enemigo, por dos cosas buenas que me habían sucedido; así que inmediatamente, comencé a reprender ese espíritu, echarlo fuera de la propiedad y de las personas que escuchaba hablar fuerte; seguí orando delante de Jesús y comencé a entregarle el control de todo al Espíritu Santo, diciéndole que confiaba en él, porque yo soy su responsabilidad y se que me va a defender.

Estuve intercediendo por mí y por todos los que viven en esta propiedad y sentí que tenía que poner mis canciones preferidas para Jesús y orar como cada mañana.
Inmediatamente, mientras estaba en intimidad con Jesús, la paz y el gozo comenzó a llenar mi corazón; una paz incomprensible ya que no sabía que iba a pasar, porque seguía escuchando las voces fuertes en el piso de abajo, pero mi corazón se llenó de paz.

Le escribí a mi líder y a la hermana que coordina la cadena de oración, para que me apoyaran en oración y le comenté a mi líder que no entendía si estaba loca o que, pero que sentía mucha paz; ella me contestó que esa paz era sobrenatural

Por eso vino a mi mente la actitud de Jesús en la embarcación y por el contrario el miedo de sus discípulos. ¿Cuál habrá sido la diferencia?

Todos estaban en la misma embarcación y además ellos tenían la ventaja de que Jesús estaba con ellos ¿Entonces que les sucedía?

Conocer realmente a Dios, marca la diferencia; es necesario que el Espíritu Santo abra nuestros ojos espirituales, para ver al Dios Todopoderoso en nuestras vidas; necesitamos tener fe, a pesar de... lo que venga a nuestras vidas.

Luego la gente que estaba inspeccionando, se fue; no se que puede acontecer, pero tengo la seguridad de que el Señor defiende a sus hijos, nunca los abandona y tiene la última palabra.

Esa certeza, esa confianza en nuestro Dios, marca la diferencia.

Un joven viajaba en un avión, de repente entraron en una fuerte turbulencia, todos entraron en pánico, algunos gritaban, otros lloraban, pero el joven se mantenía en calma; mirando por la ventanilla; alguien le dijo: ¿Cómo puede estar tan tranquilo? y el joven les contestó sonriendo: Lo que pasa es que mi padre es el piloto.

¡Qué confianza en su papá verdad?

Jesús es nuestro piloto; no debemos temer y veremos grandes victorias en nuestras vidas.

No solamente en nuestras vidas, sino que podremos ayudar a otros a confiar en Dios y vivir en paz, a pesar de...

Ore, clame y luego confíe su necesidad en manos de Jesús que lo Ama Mucho y le importa lo que a usted le sucede, siempre lo escucha y le responde. Tenga fe.

"Tú guardarás en perfecta paz, a aquel cuyo pensamiento en ti persevera

porque en ti ha confiado"

Isaías 26:3

Dios lo bendiga
Susana Goglián

"TENGO HAMBRE DE TI"

Jesús Adrián Romero

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