La imagen de hoy dice: El que cree en mí como dice la Escritura
de su interior correrán ríos de agua viva. Juan 7:38
Todo ser humano va por la vida buscando paz, pero cada vez es más difícil conseguirla. Estamos rodeados de mucha violencia, egoísmo, inseguridad.
Viajar en las ciudades, se ha convertido en un infierno, pareciera que viajan más confortablemente los animales que son llevados en camiones, que las personas, en subtes, trenes, colectivos; es algo realmente insalubre.
Muchos cuando logran llegar a su hogar después de una jornada agotadora, piensan por fin llego a mi casa, voy a encontrar paz; pero lamentablemente en muchos casos encuentran, reproches, gritos, discusiones, egoísmos, indiferencia, soledad.
Pero hay una buena noticia para el que decide poner su fe en Jesucristo, en medio del caos que nos rodea, podemos encontrar esa paz tan deseada en su presencia, en nuestros momentos de intimidad, oración, adoración y alabanza.
Cuando uno llega a la iglesia y comienza a cantarle a Jesús junto a cientos de hermanos, canciones bellas que nos hacen olvidar todas las luchas diarias, literalmente podemos sentirnos en un mundo dentro de otro.
El secreto es tener una relación diaria con el Señor, sin religiosidad, ni protocolos, sencillamente, sinceramente, de rodillas ante Él, contándole todo los que nos ocurre y nos angustia, permitiendo que nuestro ser se vacíe a los pies de la cruz y se llene de la presencia del Espíritu Santo de Dios.
Si no lo probó todavía y necesita paz, le invito a entregarle su corazón a Jesús, sinceramente, pidiéndole que entre en su vida, con sus palabras, pidiéndole perdón por todos sus pecados, aún por esos que usted ni imaginaba que eran pecados y que a Dios no le agradaban y estaban impidiendo que su relación con Jesús fuera una relación de amistad.
Si le entregó su corazón a Jesús, le invito a escuchar esta canción, permitiendo que Dios lo llene con su preciosa presencia.
Le garantizo que la paz del Espíritu Santo de Dios llenará su corazón; luego busque su presencia diariamente; Jesús lo estará esperando para volver a darle paz, en medio del caos y la confusión del mundo.
En ningún otro lugar encontrará la paz y el amor que Jesús va a darle si anhela su presencia, no es suficiente una vez por semana en el templo, si no en su hogar, en la intimidad con Dios.
Una vez que tiene un encuentro verdadero y profundo con Jesús, nada más podrá saciar su sed de amor, solamente Jesús. Ahora es su responsabilidad cuidar eso tan valioso que encontró en el Señor, Él ahora habita en usted, nunca lo ignore, el desea estar con usted siempre.
Mateo 28:20 dice: "... y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén. "
Dios los bendiga
Susana Goglián
"Jesús mi buen Pastor"
Marcos Witt
Marcos Witt
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