La imagen de hoy dice:
Y orando, no uséis vanas repeticiones,
como los que piensan que por su palabrería serán oídos.
Cuando logra entender que orar es "hablar con Dios", como habla con sus seres queridos, espontáneamente; lo que siente su corazón y sale por su boca; la comunicación con Jesús es mucho más natural y cercana.
Imagine por un momento a su familiar más cercano; llega a su casa y habla cada vez que lo visita las mismas palabras aprendidas de memoria ¿Que sentiría usted? ¿Podría seguirle la conversación?¿Hablarían siempre lo mismo? Creo que hasta le resultaría molesto.
Padre, Hijo y Espíritu Santo son una persona; por lo cuál podemos hablar con Él con naturalidad y desde el corazón.
Otros piensan que orar; o sea hablar con Dios; es un monólogo interminable, con voz muy alta; sin ninguna pausa que le permita al Señor responder.
No hace falta gritar; la Palabra de Dios nos muestra en algunos pasajes, al Espíritu Santo como una paloma; aunque no es una paloma en realidad, porque es una Persona; si tomamos ese símbolo; piense: ¿Qué pasa cuando está en un parque y se acerca a usted una paloma para que la alimente y de pronto usted grita o se para bruscamente? Huirá... se irá volando.
Si el Espíritu Santo es representado como una paloma; sucede lo mismo; así como habla con su esposo o esposa o con sus hijos; de la misma manera puede hablar con Dios, con la seguridad de que lo estará escuchando.
¿Cómo comienza una conversación con una persona? Lo saluda; se acerca suavemente y le comienza a contar lo que le sucedió ese día; le pregunta como está, lo escucha. No hay diferencia con Dios; puede acercarse y decirle: Buenos días Espíritu Santo; te doy la bienvenida en este día; vine a hablar contigo; ven, te necesito...
Cuando logra tener una relación espontánea con Jesús, se sorprenderá, porque no le quedará ninguna duda cuando llegue a usted su Presencia; porque estará acostumbrado a sentirlo; su cuerpo dejará de estar tenso y la paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento (como dice en Filipenses 4:7); llenará todo su ser; podrá sentir el abrazo de Jesús; no hay nada más hermoso en esta vida, que sentir su abrazo.
Si practica esta manera de orar; sus momentos con Dios darán un vuelco total; esos largos monólogos, se convertirán en dulces diálogos; con aquel que lo escogió desde el vientre de su madre (Gálatas 1:15); nadie puede comprenderlo como Él; recuerde que Dios lo formó; es una creación suya ¿Cómo puede no conocerlo y entenderlo?
Dios es omnisciente; todo lo sabe, conoce su corazón, sus pensamientos, sus sentimientos y lo ama más que nadie en este mundo podría amarlo.
Inténtelo; cambie su manera de orar, hable dulcemente con Él; hasta puede clamar sin gritar; Dios lo va a escuchar de todas maneras; el Espíritu Santo intercede por usted. Dice en Romanos 8:26: "Y de la misma manera, también el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; porque no sabemos orar como debiéramos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles"
Dios nos dio con su gran sabiduría; todas las herramientas necesarias para orar y ser oído por Él. Comience a dialogar con Jesús; hable y escuche y saldrá del momento de oración fortalecido, con paz y con la esperanza de que todo va a estar bien; porque ha dejado todo en sus manos.
Dios le bendiga
Susana Goglián
"ES ORANDO"
Patty Tamares
Lea una reflexión cada día en su celular :
Ingrese a:
Sígame en FACEBOOK
Dele ME GUSTA a esta página
Suscribase haga clic en el siguiente link:
y reciba los mail en su correo todos los días
EL LIBRO EN PAPEL
Lo encuentra en Autores Editores
Suscribase a mi canal de YOUTUBE
