La imagen dice:
De su interior, brotarán ríos de agua viva
El pozo de Jacob
El pozo de Jacob, junto a él se sentó Jesús, cansado del camino, junto a una mujer samaritana que no conocía a Jesús. Lea Juan 4:6-15-
¿Usted conoce a Dios? ¿Realmente sabe cuánto lo ama? ¿Experimentó en su ser el Amor incondicional de Dios?
¿O solamente escucha hablar de Él y aprende de la Biblia, su Palabra, pero no lo siente real en su vida?
Mucha gente cree que conocer a Dios, es solamente ir a la iglesia; cumplir con todo lo que el Señor demanda de su vida; pero a la vez, sigue caminando solo por la vida; porque aunque se congrega, no tiene una relación personal y apasionada con Jesús.
Quizás antes iba a la iglesia católica y ahora va a una cristiana evangélica, pero solo tiene una religión.
Pero ¿sabe que eso no es todo? Hay mucho más para usted... puede vivir la plenitud de su presencia; puede conocer a Dios cada día más; a través de estar en una intimidad diaria con Él, por escuchar su voz, por conocerlo cada día más; por verlo obrar en su vida.
Así comienza a descubrir que Dios no es un Dios castigador, sino un Padre Amoroso, que desea tener cada día más comunión con sus hijos, los que lo han invitado a su corazón; pero no se conforman con eso; sino que acrecientan cada día y así su relación comienza a ser muy real; porque anhelan estar en los brazos de Jesús cada día y comienzan a descubrir su Gran Amor por cada uno de sus hijos.
Dios es Amor; y no solo eso, es el amor que usted necesitó toda su vida, sin imaginar que el único Amor completo y verdadero, es el de Jesús.
¿Qué es entonces conocer a Dios? Es vivir una relación de intimidad diaria con El.
Le hago una pregunta; cuando se enamoró ¿le alcanzaba con ver a su ser amado, una vez por semana? ¿O lo extrañaba y no podía dejar de ir a verlo cada día para expresarle su amor?
Si se enamora de Jesús, no le va a alcanzar con encontrarse con Él solamente en la reunión del fin de semana en la iglesia y luego despedirse de Jesús hasta el próximo fin de semana.
El amor se expresa con acciones; con demostraciones; el amor no se imagina, se vive; es una relación de dependencia de la otra persona.
Dios anhela encontrarse con usted y darse a conocer cada vez más.
Cuando usted comienza a sentir en su ser la presencia maravillosa del Espíritu Santo; no puede estar mucho tiempo sin volver a buscarla.
Actualmente me está sucediendo; el hambre de su Presencia en mí, es cada vez mayor; anhelo más y más de Jesús.
Comienzo el día orando para entregarle el día al control del Espíritu Santo, le pido que me llene con su presencia, le doy la bienvenida y le digo: Ven... Y no se hace desear, el dulce abrazo de Jesús, produce en mí un deseo de más, cada vez más.
Tengo que trabajar como todos y me está ocurriendo que en un descanso en una de mis tareas; siento que el Espíritu Santo me llama a orar, a estar con Él, a veces sin palabras, solamente adorándolo.
Pienso ¡que privilegio que Jesús quiera estar conmigo y me invite a su presencia!
Pero esto no ocurre solamente conmigo; el Espíritu Santo invita a todo aquel que ama a Jesús y está dispuesto y disponible, poniéndolo en primer lugar SIEMPRE A JESÚS.
¡A veces las excusas son tantas! Me parece increíble que alguien le diga: esperá Jesús ahora no puedo, estoy ocupado.
Porque ¿usted está de acuerdo conmigo? Dios todo lo sabe y si lo está llamando, es porque sabe que puede.
Si desea conocer más a Dios; disponga su corazón y va a vivir experiencias maravillosas y sobrenaturales con su Espíritu Santo; se lo aseguro.
Si no las vive, es porque no las anhela; en ese caso el único impedimento que Jesús encuentra, es usted; porque el Señor cada día está a la puerta de su corazón y llama para estar con usted, para que pase tiempo con Él; para abrazarlo y expresarle cuánto lo ama.
¿Necesita amor? Entonces necesita a Jesús, no dilate más el momento de tener un verdadero encuentro con Él.
En ese momento, cuando le pregunten ¿Cuánto conoce a Dios? Tendrá tanto que contar, de cada encuentro con Él, de cada respuesta a sus oraciones; de todas las demostraciones de Amor de Jesús hacia usted.
Decídase, no está tan lejos como usted cree; hable con Él, siempre lo va a escuchar y su Espíritu Santo se va a manifestar poderosamente en usted.
Juan 4:6-15
Dios le bendiga
Susana Goglián
"ANHELO CONOCERTE"
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