Mateo 11:28-29 en la Santa Biblia dice:
"Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados,
que yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí,
(dice Jesús) que soy manso y humilde de corazón
y hallaréis descanso para vuestras almas.
El ritmo de vida que llevamos es vertiginoso, por lo cuál es necesario también descansar, para poder seguir adelante.
Pero el verdadero descanso, lo encontramos en nuestro interior, solamente Dios nos lo puede dar.
Acabamos de pasar un fin de semana largo, por un feriado en la Argentina y la gente decidió irse de viaje para descansar fuera de su casa.
¿Encontrarán descanso duradero realmente viajando por cuatro días? Horas y horas de viaje, cargar con los bolsos, trasladarse al llegar al lugar donde se hospedarán, luego empacar nuevamente para volver, viajar en medio del tránsito congestionado para llegar a sus casas. ¿Y al otro día que...? Nuevamente a trabajar, en medio de la locura que actualmente se vive en la ciudad.
El hombre busca incansablemente, precisamente "descanso" pero no lo puede hallar. El verdadero reposo solamente lo puede dar, el tener a Jesús en nuestro corazón.
Aprendiendo a sobrevivir en medio de los problemas y dificultades con paz, con esperanza y confianza en que Dios todo lo puede y nos defiende de todo y de todos.
¡Cuántas injusticias y presiones vivimos diariamente!
La Biblia, la Palabra de Dios dice: "Porque así ha dicho el Señor: En descanso y en reposo serán salvos. En quietud y en confianza será vuestra fortaleza...", en Isaías 30:15
También otro pasaje que me gusta mucho en la Biblia, es esta promesa:
"No habrá para que peléis vosotros en este caso, paraos, estad quietos y ved la salvación de Dios con vosotros" 2 Crónicas 20:17
Realmente si le hemos entregado el corazón a Jesús, no hay mejor descanso para nuestras vidas que sus promesas.
Es muy importante que lea su Biblia y que la memorice, porque en los momentos que necesite recordarla, en medio de alguna situación difícil, el Espíritu Santo le traerá a memoria, la Palabra justa para lo que esté viviendo.
Nuestro descanso verdadero está en nuestra amistad y comunión diaria con nuestro Creador, no la busque afuera, porque no es duradera.
Jesús le ama y espera que usted hable con Él cada día, eso es precisamente orar: hablar con Dios, sinceramente, lo que esté en su corazón, Jesús siempre tiene tiempo para escucharle. Una vez que le entregue todas sus preocupaciones, recibirá ese ansiado descanso, porque el problema no estará ya sobre usted oprimiéndolo, sino que estará en manos de Dios que todo lo puede.
Dios le bendiga
Susana Goglián
"ABRE LOS CIELOS" - INGRID ROSARIO
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