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lunes, 5 de octubre de 2015

"PARE DE QUEJARSE"

La imagen dice: Pare de quejarse

¡Qué difícil le resulta al ser humano no quejarse! ¿A usted le sucede? Parece que es más fácil la queja que el agradecimiento por lo que uno tiene.
En una conversación normal con una persona ¿Se dio cuenta cuantas veces se queja la gente de todo? Uno mismo sin darse cuenta cae en la queja.
Personalmente me molesta mucho escuchar quejarse a las personas, pero a veces no me doy cuenta cuando yo misma lo hago. 
Les decía a algunas personas cercanas hace unos días, lo triste que sería para nosotros si Jesús se quejara de todo lo que tuvo que pasar para salvarnos. ¿Lo imagina diciéndonos: Por vos tuve que cargar con una cruz tan pesada, me clavaron clavos en las manos y en los pies. Tanto sufrimiento para que  vos hagas esto o lo otro... 
Gracias a Dios que no lo hace. Lo mínimo que podemos hacer nosotros es no quejarnos por el tiempo  que dedicamos para servirle a Él, o por el esfuerzo que implica viajar para ir a congregarnos y de tantas otras cosas.
Lamentablemente muchos cristianos practican la "quejabanza", mitad queja y mitad alabanza.
Muchas veces me escucho a mi misma diciéndome "estoy tan cansada" reiteradamente, casi sin darme cuenta.
La vida no es fácil, por lo tanto nos agotamos, pero por medio de la oración, podemos dejar las cargas a los pies de la cruz y seguir adelante con las fuerzas que Dios nos da. Salmos 55:22 dice: "Echa sobre Jehová tu carga, y él te sustentará; No dejará para siempre caído al justo."
Tantas desilusiones, gente que no cumple con lo que promete, la impotencia de solucionar cosas que dependen de otras personas, realmente es agotador. 
Tenemos tanto que agradecerle a nuestro Señor, que deberíamos tomar su ejemplo y hacer las cosas como dice su Palabra en  Colosenses 3:23-24: "Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís".

Dios está siempre con nosotros, solamente tenemos que ir a buscar nuevas fuerzas en Jesús, quién nos espera en todo momento con los brazos abiertos, para darnos ese abrazo que tanto necesitamos, diciéndonos: yo comprendo lo que estás pasando, fuerza, confiá en mi, yo estoy contigo.


Escuche esta canción, realmente me quebrantó y me hizo reaccionar, 
Dios siempre nos defiende. 
Dios los bendiga
Susana Goglián

ESTO ES CONFIAR. Nancy Amancio



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