Estaba
lavando la pecera, cuando llegué al fondo, saqué las piedritas de colores, que
la embellecen, levanté las plaquetas del fondo y me encontré con el agua negra,
la suciedad se había concentrado en el fondo. Esto me hizo pensar en los seres
humanos; porque si miraba la pecera antes de empezar con la limpieza, antes de
extraer a los peces, se veía limpia, el agua transparente, pero en el fondo no
estaba igual, fue suficiente remover las piedras y en el fondo me encontré con
la sorpresa de su estado real, agua negra.
La
Palabra de Dios dice en Mateo 23:28: "Así también vosotros, por fuera
parecéis justos a los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía y de
iniquidad"
Realmente
podemos tener apariencia de bondad y simpatía, pero el interior solo Dios lo
ve.
Hay otro
pasaje en la Biblia, dice en Lucas 11:39: "Entonces el Señor le dijo:
«Ustedes, los fariseos, son tan cuidadosos para limpiar la parte exterior de la
taza y del plato pero ustedes están sucios por dentro, ¡llenos de avaricia y de
perversidad!"(NTV)
Solamente
el Señor ve nuestro interior, podemos engañar a todo el mundo, pero Dios nos
conoce realmente.
No
alcanza con ir a la iglesia, cumplir con reglas, tenemos que limpiar nuestro
corazón.
Cuando
tenemos un verdadero encuentro con Jesús, no podemos convivir con la mentira,
la murmuración, la hipocresía y otras cosas que no corresponden
a los hijos de Dios, a las nuevas criaturas que queremos agradar a nuestro
Jesús, que se sacrificó hasta la muerte para salvarnos; a nosotros mismos nos
molestan esas cosas que a Dios no le agradan.
Dice en
Salmos 45:7: "Amaste la justicia y aborreciste la maldad: Por tanto
te ungió Dios, el Dios tuyo, Con óleo de gozo sobre tus compañeros".
No
alcanza con tener una serie de costumbres nuevas, sin verdadero arrepentimiento
y cambio de actitud, no podemos llamarnos cristianos. Amar la justicia y
aborrecer la maldad.
¿Qué ven
los que le rodean a través de su vida? Pero... ¿Cómo es realmente usted cuando
está solo y nadie lo ve?
No da todo igual,
no importa que la mayoría lo haga, la Palabra de Dios es terminante dice:
"Antes bien, así como aquel que os ha llamado es santo, también sed santos
vosotros en todo aspecto de vuestra manera de vivir.
¿No es
fácil? Por supuesto que no, pero Dios ve nuestro corazón, si deseamos
agradarle, nos va a dar las fuerzas y la salida para cada circunstancia, para
cada tentación.
Si uno va
con la verdad, a pesar de que parezca que nos puede perjudicar, Dios siempre va
a estar de nuestro lado, nos va a defender y nos dará la victoria.
"Cristianos" significa
"pequeños cristos".
¿Cómo
está nuestro fondo? ¿Qué ve Jesús cuando nos mira?
Es tiempo
de reflexionar y de tomar decisiones terminantes, que nos ayuden a vivir en paz
y en armonía con Dios y nuestros semejantes.
Sugiero que escuche la canción:
"Renuévame" de Marcos
Witt
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